A
sus 76 años, el psiquiatra chileno Claudio Naranjo es considerado como uno de
los maestros contemporáneos en vida. Profesor de una docena de prestigiosas
universidades de todo el mundo y doctor honoris causa por la italiana de Udine,
es autor, entre otros ensayos, deCarácter y neurosis y Cambiar la
educación para cambiar el mundo. También es el fundador del programa Searchers
After Truth (SAT), orientado a promover el autoconocimiento y el desarrollo
personal, integrando herramientas y disciplinas occidentales y orientales.
Naranjo ha sido invitado recientemente por Esade para reflexionar sobre cómo
impulsar una formación más humanista como respuesta a la deshumanización de las
empresas y de la sociedad.
Pregunta. ¿Cómo
es posible que se deshumanicen los seres humanos?
El chileno Claudio Naranjo está considerado como uno de los maestros de la psiquiatría contemporánea. |
P. ¿Cómo se sabe que una
persona vive identificada con su ego?
R. Es fácil: en primer lugar,
porque a pesar de hacer y tener de todo siente un vacío en su interior, como si
le faltara algo esencial para vivir en paz. De tanto dolor acumulado,
finalmente se desconecta de su verdadera humanidad. Desde el ego, las personas
actúan movidas por el miedo y la necesidad de supervivencia física y emocional.
Su objetivo es conseguir que la realidad se adapte a sus deseos, necesidades y
expectativas egoístas, lo que les lleva a vivir una vida marcada por el
sinsentido, el malestar y la necesidad constante de evasión y narcotización de
sí mismos.
P. ¿Por qué prevalece la
deshumanización de las empresas y de la sociedad?
R. Porque llevamos muchas
décadas condicionando a los seres humanos con falsas creencias sobre quiénes
son y cuál es su relación con el mundo. Debido a la ignorancia ha prevalecido el
ego, desde el que se ha construido una sociedad competitiva, agresiva,
avariciosa, superficial, insatisfecha, vacía y ambiciosa, que a su vez sigue
condicionando a las nuevas generaciones para preservar elestablishment.
P. ¿A qué se refiere?
R. El mundo se ha convertido
en un negocio en manos de las grandes corporaciones. Debido al sistema
monetario, todas las instituciones funcionan bajo un mismo principio creador:
su propia supervivencia. Tanto los Gobiernos como las entidades financieras,
las empresas y las instituciones religiosas, que tanta influencia tienen en la
sociedad, están orientadas a optimizar sus recursos para tener el mayor lucro
posible. El bienestar de la humanidad y del medio ambiente les trae sin cuidado
porque no es rentable.
P. De ahí la dificultad de
tener verdaderos líderes humanistas...
R. Exacto. A la maquinaria del
sistema monetario sólo le interesa que las cosas sigan como están, incluyendo
los 40 conflictos armados existentes hoy y que tanto dinero generan a la
industria armamentística mundial. Por eso, líderes como los hermanos Kennedy,
Gandhi, Luther King y tantos otros fueron asesinados. Los que tienen el poder
tan sólo están interesados en continuar teniéndolo, y para eso necesitan seguir
esclavizando a los pueblos por medio de la deuda y los intereses bancarios, que
impiden que la humanidad salga de este círculo vicioso.
P. ¿Y cuál es su propuesta?
R. Un cambio radical en el
proceso de formación humano. Ahora prevalece el condicionamiento egoico, que
provoca que el hombre siga siendo un esclavo. En cambio, una educación basada
en nuestra verdadera naturaleza potencia el desarrollo de nuestra conciencia,
lo que nos libera de las falsas creencias acumuladas por el ego y que tanto
limitan nuestra existencia. La crisis económica tan sólo pone de manifiesto
nuestra crisis de conciencia. Es un indicador de que algo está funcionando muy
mal.
P. Usted suele hablar de
"la búsqueda de la verdad"...
R. Todos los grandes sabios de
la humanidad, como Buda, Lao Tse, Jesucristo o Sócrates, han dicho lo mismo: el
sentido de la vida es aprender a trascender nuestro egoísmo y egocentrismo para
que podamos ver a los demás y al medio ambiente que nos rodea como parte de
nosotros mismos. No existe la fragmentación, sólo la unidad: todos somos uno.
Buscar la verdad implica cuestionar el condicionamiento sociocultural recibido
para recuperar el contacto con nuestra verdadera naturaleza. No es ningún
síntoma de inteligencia adaptarse a una sociedad como la actual, profundamente
enferma. El líder que las empresas necesitan para mejorar la realidad debe ser,
ante todo, un hombre consciente, libre y sabio. -
Tomado de: http://elpais.com/diario/2009/02/15/negocio/1234709248_850215.html
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